En la actualidad, cada vez más personas se marcan el objetivo de pasar por el quirófano por razones estéticas; si bien, habiendo oído muchas veces palabras como mamoplastia o mastopexia, que es el levantamiento de busto en León, no saben exactamente qué operación es; por lo tanto, hay que entender que ambas son intervenciones quirúrgicas que atienden las mamas, pero son muy diferentes entre sí.
Los pechos son una de las partes del cuerpo que define a la mujer en su sexualidad, es por ello que se les da tanta importancia. Demasiado grandes, muy pequeños o caídos: sus dimensiones y su colocación correcta se corrigen con mamoplastia y mastopexia. Sin embargo, no todas las mujeres se ponen en manos de cirujanos por razones estéticas, ya que, en muchos casos, razones médicas, como los problemas de espalda o trastornos psicológicos, influyen en esta decisión.
Por un lado, la mamoplastia conlleva una transformación en el volumen y forma de los senos. Ustedes pueden realizarse una mamoplastia de aumento, en la que los cirujanos plásticos reconocidos en León colocan implantes de silicona o de gel, según las consideraciones de estos especialistas, con la finalidad de que las proporciones del busto sean más grandes y adecuadas respecto al resto del cuerpo; pero, para aquellas mujeres cuyos pechos son excesivamente grandes, la mamoplastia de reducción es la mejor opción.
No obstante, la mastopexia difiere de este procedimiento, porque su objetivo no es otro que el de levantar los senos caídos. Cuando la piel mamaria cede por razones variadas, como el peso, la edad o el embarazo y la lactancia, se produce una caída excesiva a la que se le conoce como ptosis. Es común que las mamas pierdan firmeza y luzcan caídas a partir de cierta edad. En estos casos, no se modifica el volumen, sino la posición. La piel distendida es eliminada, elevando la posición de areola y pezón, así como el surco submamario.
El resultado final de esta cirugía de mamas en León Gto será la recuperación o restauración de la forma de los senos, que lucirán más firmes y armoniosos. El proceso de recuperación será paulatino y la apariencia última sólo podrán apreciarla al cabo de algunos meses, y a menos que gane o pierda peso de manera significativa, la nueva forma debería permanecer constante.
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